«Enseñarás a volar, pero no volarán tu vuelo.
Enseñarás a soñar, pero no soñarán tu sueño.
Enseñarás a vivir, pero no vivirán tu vida.
Sin embargo… en cada vuelo, en cada vida, en cada sueño,
perdurará siempre la huella del camino enseñado.»
Madre Teresa de Calcuta.
El mejor obsequio que un buen padre puede dar a sus hijos es la entrega de herramientas para la vida.
Que tu hijo reciba las ventajas de la Programación Neurolingüística a temprana edad, es tanto como entregarle la varita mágica que le da acceso a una vida sana y exitosa.
Dale a tu hijo este hermoso obsequio por su gran labor durante todo este año de cambios, también es un reconocimiento para ti.
Potencia con este campamento de verano su desempeño en el próximo año escolar.